RECURSOS FINANCIEROS
No es ningún despropósito hablar de recursos financieros para nuestra aldea de Poedo. La estructura multisecular de su economía, que utilizaba el trueque para cubrir a cabalidad sus necesidades elementales, es idéntica a la de otras muchas aldeas, villas y aun ciudades del entorno. Hubo, ciertamente, visionarios que construyeron pozos y establecieron fábricas de bebidas gaseosas…Pero cuando la mano de obra levanta la mirada y el vuelo a otros lugares de España, Europa y América, tiene que producirse inevitablemente, un cambio. Un cambio lógico, porque por una parte, la campiña queda abandonada y por otra, no hay quien lleve los animales al monte. “Lo único que nos queda son los penedos y el viento. Pues de ellos tendremos que extraer el pan.”
AGRICULTURA Y GANADERIA
Podemos afirmar, sin lugar a dudas, que la principal fuente de ingresos de los vecinos de Poedo, ha sido siempre su agricultura, seguida, aunque desde lejos, por su ganadería. Esta realidad socio-económica se debe a la calidad de las tierras y a la seguridad de contar con agua suficiente para el riego. El riego llega a constituir una tarea casi diaria, fraternal y responsablemente organizada, no obstante que la frontera agrícola no llegará a sobrepasar nunca la mitad de la propiedad territorial del pueblo El único enemigo de esta fuente de ingresos, si es que se puede tildar de tal, no han sido las sequías, -que sí las ha sufrido y prolongadas-, ni los incendios, -ese famoso invento moderno de satanás-, sino el minifundio, algo que inexplicablemente, persiste todavía.
La ganadería caminó siempre a nivel, no tanto comunal sino privado, y en forma significativa. Se podría decir que hasta ayer no más, los animalitos vivían en casa y hasta formaban parte de la familia. Hoy, según informes de última ahora, para bien de todos y por desgracia de algunos, han sido expulsados de casa, a excepción de perros y gatos y pajaritos cantores. Tenían alimentación asegurada (hierba verde, hierba seca, “ferraia”, alfalfa, forrajes, “farelos” y otras golosinas entre las que se podría incluir el pasto de los montes comunales; un pasto que no siempre les fue seguro, pero que, por lo menos, facilitaba su oxigenación y su distracción.
EL COTO DE CAZA
El coto de caza de Poedo no es lo mismo que el Coto de Poedo, aquella demarcación territorial político religiosa que se ponía en propiedad y bajo la autoridad de un señor “feudal”. El Coto de Caza de Poedo vino a ser un invento institucional, creado por el Municipio, para evitar que los vecinos del pueblo cacen durante el tiempo de veda y, una vez abierta la cacería, tener abundancia de caza para propios y extraños. Es, ciertamente, bueno que aumenten las piezas de cacería, pero no es tan bueno que se las lleven los foráneos. La cacería constituye un recurso alimenticio bueno para el pueblo, pero claro, no todos los vecinos son cazadores.
EL GRANITO
El recurso que le reportó a Poedo un poco de circulante para su caja chica fueron, paradójicamente, sus piedras, las piedras del monte. Poedo fue siempre un pueblo rico en piedras. Rico en granito. Granito del país.
Granito blanco y granito gris. La cantera de extracción está ubicada en el Paraje de As Laxas Longas. La Compañía extractora es la de “Cabrera y Trigo”, una empresa de Xinzo de Limia. Esta empresa comenzó sus trabajos de extracción, apoyada en un Contrato que entendemos fue “doloso e írrito” y que, en el transcurso de algunos años, devino, más que en una fuente de ingresos, en una fuente de disturbios, por el uso no concertado de los caminos para el transporte de sus productos, problema éste muy similar, aunque no igual, al de la “Farriense de Granito”, que explotó el macizo granítico del Monte Farria, contraviniendo las disposiciones legales sobre el medio ambiente y siendo observada por la Fiscalía en funciones a la fecha. La herida infligida por la Cabrera y Trigo al monte de Poedo -y que pueden ustedes apreciar desde el Google Earth y desde medio centenar de pueblos-, tiene cura pero aún no ha sido curada.
LOS SUEÑOS EÓLICOS
Después de haber renunciado a plantaciones de pinos, por parte de la Comunidad Vecinal de Montes de Poedo, debido a la plaga de los incendios de la zona, los sueños eólicos constituyeron durante un tiempo, una posible y cierta pero difícil fuente de ingresos para Poedo. La ubicación geográfica del monte de Poedo, dividido tan sólo por una línea virtual o imaginaria del monte de Farria, ofrecía y ofrece, según los estudios pertinentes, un emplazamiento ideal para producción de fuerza eólica. Tras sus primeros pasos, el estudio de factibilidad se ahogó en las fuentes de la financiación. A Dios gracias no está dicha la última palabra.